En los últimos tiempo hemos visto
como el debate de legalizar la comercialización del cuerpo de las mujeres en
España mantienen a la población dividida así como a diferentes vertientes del
feminismo entre: PROHIBICIONISMO (Castiga y desprotege a la víctima del
proxeneta y mantiene impune al esclavizador) REGULACIONISMO (Regula los
derechos laborales ignorando que el origen de la industria del sexo es la
pobreza extrema y falta de recursos , convirtiendo a los proxenetas en
empresarios respetables) Y ABOLICIONISMO (busca cambiar las condiciones
materiales para que no se tenga que recurrir a la prostitución como única
salida y castiga al proxeneta y putero). Vemos como el dialogo ensordecedor de
las tristes realidades que esconde este mercado de humanas, va calando en una
población que se apropia del dialogo del defensor/a del servicio y apoderado de
la industria, bajo: “La profesión más antigua del mundo”, “Yo la que conozco lo
hacen porque quieren, ganan mucho dinero “Si existen, ellas también tienen
derechos” …etc.
Recientemente hemos tenido que
vivir como un gobierno que se determina como feminista por tener una mayoría de
mujeres en cargos de responsabilidad, daba de alta un sindicato de trabajadoras
sexuales provocando la dimisión de la Directora de Trabajo, reconociendo
previamente que había sido un error. Por otro lado, hace un par de semanas,
diferentes organizaciones denunciaban en TV, como Barcelona subvencionaba con
dinero público cursos para ser “Una buena Puta” y veíamos como su alcaldesa
apoyaba el sindicato y su legalización.
Llegada a este punto permítanme
que ponga en duda las verdaderas intenciones de quienes nos representan y dicen
abanderar los DDHH y máxime tras la exposición de los siguientes datos y mi
propia experiencia en las calles: Según datos del INE España es la mayor
consumidora de este servicio de la zona euro siendo este uno de los negocios
mas rentables por encima de la venta de armas y narcotráfico, en el que un gran
porcentaje es dinero negro. Entre 300.000 y 400.00 personas se dedican a la
prostitución en nuestro país, se estima que un 90% son mujeres y el 10% restante
son hombres y transexuales.
De las trabajadoras sexuales que
en la actualidad están activas en España un 70% son extranjeras y un 20%
españolas, aumentando este último dato en los últimos años ante el azote de la
crisis que está sufriendo España y situando la media de edad en 35 años,
advirtiéndose una infantilización en
esta última etapa. El 85% de las mujeres
que ejercen la prostitución en el caso de las extranjeras vienen huyendo de la
pobreza extrema y en el caso de las españolas se ven obligadas a ejercerla para
ingresar algo de dinero en el núcleo familiar ante la falta de alternativas
laborales, ayudas sociales…etc. Mas de un 70% de las mismas han vivido al menos
un episodio violento mientras ejercían…NO, MIENTRAS ERAN EXPLOTADAS ¡¡Comencemos
a llamarle a las cosas por su nombre!!!
Hace unos días he tenido la
oportunidad de compartir diferentes espacios con un grupo de jóvenes mujeres
que llevaban acampadas 78 días en sol para solicitar un “Punto morado 24 horas”
que tienda la mano a cualquier mujer que sufra la violencia machista,
convirtiendo la capital de España en un referente de lucha real para el resto
de las comunidades. Pude comprobar que en esos más de dos meses de la
ACAMPADA FEMINISA SOL, ninguna ONG, representante político autonómico o nacional
se había interesado en sus peticiones o labor realizada, salvo el gobierno
local para intentar echarlas. En las pocas horas que estuve allí el paso de
mujeres de todas las edades era continuo, acumulando testimonio tras testimonio
de situaciones vividas muy graves en cortas edades y sin acceso a ningún tipo
de ayuda. Dos mujeres de las que se acercaron que no superaban los 22 años,
relataban la situación violenta que habían tenido que vivir en su infancia por
parte de su progenitor y como en la huida, un proxeneta aprovechando las
diversas necesidades y desamparo las capto, violó siendo una de ellas menores.
Lograron salir y se planteaban como denunciar a quien les advertía de la gran
cantidad de contactos con poder que tenía y hoy en día las persigue bajo la
instrumentada escusa de una supuesta “deuda”. El acogimiento del grupo base,
así como la búsqueda de soluciones fue ejemplar, no siendo un inconveniente
para ninguna de ellas lo que conlleva la inexperiencia de la juventud que
diferentes situaciones gravosas vividas, les habían resquebrajado y a otros
casos robado.
Estando en la plaza les comentaba
la propuesta de este articulo y nuevamente me sorprendió la firmeza de su
posicionamiento en base al conocimiento relacionado con la explotación sexual
que sufren ese 85% de la norma y que está intentado ser silenciada por ese 5%
de mujeres que dicen ejercer la prostitución desde la libertad y como scort,
que resumo. “Nuestros representantes políticos se han acostumbrado a legislar
desde sus tronos, pulpitos que no les permiten conocer la realidad del problema
y proponer medidas que combatan de forma real la problemática mirándola de
igual a igual ¡¡Urge humanizar!!
Durante esos días que estuve en
Madrid aprovechamos la convocatoria de la secretaria del Estado de Sanidad,
Igualdad y Servicios Sociales sobre el desarrollo del Pacto que lanzó hacia
diferentes organizaciones entre las que estaba Ve-la luz, para asistir junto
con una de las portavoces de la Acampada Feminista Sol. El día 7 tras 78 dias de acampada ejercieorn su
derecho a ser escuchadas por quienes dicen que nos representan desde las
diferentes poltronas y pulpitos, olvidando sus deberes. Entre 15 / 20
representantes de organizaciones agradecían un pacto increíble y un decreto
intragable que no producirá grandes cambios en el valle de las caídas y
cementerio de infancias rotas, como tampoco reducirá el número de las nuevas
entradas, impactos negativos y desamparo. Pero allí estaban todas, felicitando
como gobierno nuevo de mujeres y sus grandes avances en tan poco tiempo,
eludiendo que desde el 2004 al 2011 las mismas caras, iniciaron silenciosamente
la construcción de este valle y cementerio.
Por el tema que me tocaba
representar que era la violencia de género y las ayudas, reclame la falta de
ayudas directas hacia las victimas y que estaba produciendo que muchas mujeres
victimas de la violencia de género se estaban viendo obligadas a vender sus
cuerpos para pagar defensas, psicólogos o simplemente para llevar el pan a sus
hijos e hijas. Las exclamaciones de lo que supuestamente son organizaciones
feministas y abolicionistas arraigadas al sistema, negaron escandalizadas tal
evidencia, mientras una especie de estas que llaman ahora profesionales del
derecho arrancaba diciendo que el trato y defensa era exquisito en la comunidad
de Madrid y que no conocía ninguna mujer que, por motivos de desamparo
institucional, ejerciera la prostitución. Tampoco interesó el dialogo de mi
compañera Susana Guerrero cuando hablo de los abusos a la infancia, o de la
entrega de menores hacia maltratadores o centros de menores, ni de como
sutilmente se les cobra a las víctimas desde las organizaciones, a pesar de
estar subvencionado el servicio. Como tampoco creo demasiado interés que un
grupo de mujeres llevaran acampadas 78 días en la puerta del sol solicitando
ser atendidas por personal especializado a través de un punto morado 24
horas. Como de costumbre el dialogo de
la realidad incendió la sala, siendo obligadas a tener que alzar la voz
mientras el volumen de nuestros micros disminuía y por supuesto la dictadura
esta especie de femialgo, actuaba no volviéndonos a dar voz.
Ante todos estos datos,
testimonios recabados mi posicionamiento es crítico con las instituciones y
representantes políticos puesto que ninguna forma de opresión, explotación
puede ser convertida en un debate nacional para ser utilizada en campañas y
precampañas. Sobre la buena intención de combatir la violencia machista
permítame que la ponga en duda siendo conocedora de que la “profesión más
antigua del mundo impuesta por la opresión capitalista” representa el 0,35 %
del Producto Interior Bruto Nacional, moviendo como mínimo anualmente 3783
millones de euros, 40 millones en publicidad de la prostitución y sin
desarrollar los diversos marcos de la violencia hacia las mujeres.
Para mi el mensaje es claro ante
las medidas implantadas hasta la fecha, debates y posicionamientos: “Interesa
mantener el mercado de la violencia de machista” y para ello es importante
mantener estas formas de hacer política desde la lejanía, para justificar
conductas e intenciones reprochables. Y mientras tanto nos mantienen
entretenidas bajo la pregunta de: ¿Que es mejor PROHIBIR, REGULAR O
ABOLIR? Sin duda dividir para que no
seamos tan conscientes del país en el que estamos y en que manos lo tenemos,
así que urge cada dia implantar una nueva etiqueta.
Como libre pensadora que soy,
defensora de libertades y DDHH con una clara inclinación a la defensa de
mujeres y menores, no me identifico al 100% con ninguna de las etiquetas que
dividen posicionamientos. Mi posición en firme en relación con cómo ha de ser
la lucha ante la explotación y las medidas que se deben implantar para que
ninguna mujer tenga como “única” alternativa para sobrevivir tanto ella como su
familia las ayudas económicas y sociales necesarias para tener una vida digna,
así como planes de inserción laboral reales que reduzcan la posibilidad de ser
explotadas. Penalizar a los
proxenetas y colaboradores necesarios, así como testaferros, aumento de
condenas y cumplimiento íntegro de las mismas.
Y para aquellas que pretenden
legitimar o legislar en base a lo excepcional (5%) enterrando la realidad de
ese 85% que tiene como origen de la industria del sexo la pobreza extrema y
falta de recursos, sanciones y dimisiones por hacer apología de la violencia
Y después de asegurarnos de que
hemos combatido el origen (Pobreza extrema y carencia de recursos), hablemos de
ese 5% que ejerce libremente asegurandoles un sistema de protección y
obligaciones tanto a quienes la ejercen y/o consumen.